Hablemos de migración
Veo forzado comenzar explicando algo que ya sabemos, sí, los diferentes tipos o escenarios migratorios:
La migración forzada y la migración voluntaria, no hace falta explicarlas porque sería reiterativo, monotemático, cliché…pero vamos a agregarle sus raíces, la migración por razones económicas, por razones humanitarias, por crisis política, por salud, por muchas situaciones.
Lo que veo
Tengo bastante tiempo observando una mutación que se origina de dos vertientes, la migración irresponsable, y la migración por tendencia (ese fue el nombre que le puse), pero podemos llamarla de mil maneras, desde trendy hasta migración por moda.
Este modelo no es precisamente una movilización de gente desde Boston a Milan para aprender de Balenciaga…se trata de una migración impulsada 100% por una percepción irreal de contenidos percibidos, malinterpretados a través de las redes sociales y de testimonios poco asertivos.
La migración trendy se compone de ese grupo de individuos, que mira a diario gran número de fotos, que se acostumbra a leer grupos de Facebook como única referencia, que se vuelve adicto al contenido de sus cercanos o amistades en el exterior y va tomando detalle a detalle un sinfín de elementos 2.0 colocados en un simple post, en una foto, en una historia y sólo con esa información entiende y basa su proyecto de migración.
¿Cómo la gente es capaz de tomar como ”referencia de éxito migratorio”, una foto en la nieve, en la playa, en un yate en Brickell, en un concierto de Coldplay en Inglaterra o en una discoteca con Bruno Mars cantando?
Mucha gente se alimenta de contenidos que son comunes y plenamente “alcanzables”, pero tienen la incapacidad de intuir que se puede tratar de gente que esconde muchas carencias y dificultades para siquiera poder montarse en un yate o ir a ver a Coldplay.
Una conocida me comentó este ejemplo: varias amigas que llegaron hace poco tiempo al país donde vive, no aceptaban ningún tipo de trabajo porque le decían que querían tener un trabajo igual al de ella, que ya tiene casi 10 años viviendo en esa ciudad…he ahí la errónea percepción de lo que significa ser un inmigrante, asumir ingenuamente que nuestra historia estará cargada del mismo componente de logros de otro individuo; esto es variable, puede ser mejor o puede ser peor, sólo debemos hacer las cosas con un poco de sabiduría.
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Todos queremos una mejor calidad de vida y eso no tiene nada de malo, pero hay que saber manejar los lapsos, las expectativas y las posibilidades…no podemos llevar la bandera que dicta que el que emigra a Miami puede sólo con bajarse del avión, comprar un carro, comprar un iPhone X, arrendar una casa de dos pisos y lograr la vida que siempre quiso, porque sí, porque lo vi en Snapchat. Señores, se dice fácil, incluso llegas y lo realizas, pero eso no es parte del mundo digital que tu crees…
Eso tiene una historia real detrás:
- Te dan un auto por 1.000 dólares y terminarás pagándolo en 10 años. Pero eso no te lo dice la foto en redes sociales
- Crees que “compras” un teléfono por una renta mensual de 100 dólares que nunca será tuyo y nunca terminarás de pagar porque apenas salga uno nuevo la operadora te hará esclavo de otro celular que tampoco terminarás de pagar porque lo que pagas se llama “cuota de alquiler del dispositivo, más renta”, y siempre será un dispositivo que no te pertenecerá…porque ese es el negocio. Eso no te lo dice ninguna foto en redes sociales.
- La casa de dos pisos en las que dejarás mensualmente el 90% de tus ingresos y de tus trabajos de 10 dólares la hora…eso tampoco te lo dirán en las redes sociales.
Muchos, y no me excluyo porque sé que aunque no con intención, también he contribuido con mi estilo de vida en redes sociales a que otros piensen que estos países tienen una facilidad superlativa, no, no es así…hay dificultades que con el tiempo vas aprendiendo a superarlas.
Migrar no es una banalidad digital
Migrar no es una tercera dimensión, migrar significa renacer en un espacio que no te pertenece y que nos invita a ser cautelosos con las etapas que nos tocan…no hay una regla, cada quien lo hace a su manera, lo que no deberías hacer es bazar tus proyectos migratorios en una tendencia digital, hay que vivir la vida real.
Originalmente publicado en https://elqueloleablog.wordpress.com/