¡Tenemos que admitirlo! De seguro alguna vez, mientras visitamos la sección de juegos del mercado o entramos en una tienda de juguetes, de tanto en tanto vemos algo que hace que brillen nuestros nostálgicos ojitos. No hay nada de qué sentirse avergonzado, absolutamente a todos nos pasa y más seguido de lo que muchos creen. Por nuestra mente se nos pasa un inocente: “¿y si me lo compro para mí?”.
La infancia es el momento más dulce de nuestras vidas y solo aprendemos esta dura lección cuando nos volvemos adultos. Cuando llega la calvicie y los dolores de espalda, somos capaces de reconocer que hubo un tiempo en el que las responsabilidades y tareas diarias no existían para nosotros y que simplemente podíamos sentarnos a disfrutar de nuestros bloques de lego e inventar lo que sea que se nos ocurra.
Sabemos que esto es real, ya que los juguetes son aquellos que hicieron que nuestra niñez no solo sea divertida y entretenida, sino que también nos dieron decenas de herramientas que utilizamos hasta el día de hoy. Gracias a nuestros juguetes somos mejores comunicadores, tenemos una inteligencia emocional mucho más alta y podemos desenvolvernos mejor en cualquier arte que nos inspire.
Muchos doctores recuerdan con cariño su clásico juego de mesa de “Operación”, el cual los inspiró a ser médicos. Miles de ingenieros rememoran tiempos en donde la física y la mecánica eran importantes conceptos para tener un buen rendimiento en una pelea de beyblade metal fusion. Los juguetes de nuestra niñez han sido mucho más significativos para nosotros que lo que tenemos en cuenta.
Por estas razones es importante elegir los modos de entretenimiento de nuestros más pequeños con cuidado y amor. La pantalla de los celulares no debería ser la única forma en la que ellos pueden distraerse, pues no crean nada, no se involucran con sus propias emociones y no quedan recuerdos que realmente duren en el tiempo.
Imaginémonos no recordar a nuestras figuras de acción y las aventuras que vivimos con ellas. ¡Sería trágico!
Debido a esto creemos que lo mejor sería hacer algunas recomendaciones para aquellos adultos que tienen que comprar algún regalo para sus hijos, sobrinos u otros niños (o para nosotros mismos, ¿por qué no?). Siempre debemos tener en consideración que deben ser juegos o juguetes significativos, útiles y que sirvan para promover una o varias habilidades de ellos mientras crecen y se educan. Y que se puedan adquirir de forma fácil y rápida, como cuando aparecen ofertas del tipo cyberday, cybermonday, black friday, etc.
Elegir juguetes con cuidado y sabiduría
Creo que ya hemos entendido bien sobre cuán importantes son los juguetes en nuestras vidas, sobre todo al momento de pensar en qué tan felices nos han hecho. Esto va desde los beyblade burst hasta sencillos rompecabezas de animales.
Aunque en estos tiempos parezca que los niños querrán solo dispositivos tecnológicos, no nos dejemos engañar: todo pequeñín necesita de formas, colores, rostros y efectos especiales en su niñez.
- Una de las primeras virtudes más importantes a tener en consideración para comprar juguetes es la de compartirlos. Siempre es positivo pensar en juegos o juguetes que puedan dividirse en partes iguales para que los niños se diviertan con sus amigos y para que puedan formar equipos, fomentando el trabajo grupal.
Grandes ejemplos de esto son los juegos de mesa, los legos para niños o la clásica pelota de fútbol.
- Intentemos que nuestra decisión también implique comprar algo que tenga más que un solo uso. De esta manera, estamos promoviendo el uso de la imaginación y la creación de nuevas cosas. Claros ejemplos podrían ser todos los utensilios y materiales para dibujar, armar o escribir.
- Para los más jóvenes, de edades 2 a 4 o 5 años, los mejores juegos que podemos ofrecerles son aquellos que sirven para impulsar sus sentidos de lógica y matemática. Esto no quiere decir que sean aburridos, ¡para los niños nada es aburrido!
Simplemente se trata de juegos que les ayudarán a desarrollar sus habilidades cognitivas con más facilidad. En este caso los lego juguetes son perfectos, aunque hay que tener cuidado con los bloques más chicos, por eso recomendamos comprar bloques que sean de gran tamaño para comenzar. ¡De esta manera nos evitaremos el estrés de lidiar con niños que tengan atascado un lego en la boca!
- Los dibujos animados clásicos y el anime tienen un gran lugar en el corazón de niños y niñas como de seguro lo tienen para la mayoría de nosotros hasta el día de hoy. No por nada las cartas Pokemón, los beyblade chile y las figuras de Dragon Ball siguen teniendo el peso que tienen hasta ahora.
Es muy significativo demostrarle a nuestros más pequeños que sus intereses también son los nuestros, de esta forma demostramos apoyo y creamos un lazo emocional mucho más fuerte que promete una relación mucho más sana a futuro.
- Si intentamos recordar ciertos momentos de nuestra niñez también reconoceremos que hubo ocasiones en donde un juego realmente nos dio un buen dolor de cabeza. Si queremos enseñar a los niños sobre el manejo de la frustración y la resolución de problemas de seguro necesitaremos un juego que sea un buen reto para ellos.
Ejemplos claros podrían ser rompecabezas o juegos de mesa como el ajedrez y, sobre todo por su simpleza, las damas.
Nuevamente podríamos pensar en los bloques de lego chile, aunque tendría que haber un desafío para su uso: ¡en este caso es recomendado indicar a los más pequeños a que construyan cosas bien específicas como una silla, una puerta o una escalera!
Para cualquier niño o niña, desde un beyblade hasta una muñeca, pueden ser de los regalos más importantes de sus vidas, ¿quién sabe cuánto influenciará lo que les demos? Ningún niño es tonto o incapaz, por más que en ciertos tiempos lo parezcan. Recordemos que la mente de uno de ellos es como una esponja, y de las más absorbentes y fructíferas que existen.
¡Lo único que verdaderamente debemos pensar en escoger un juguete o juego con las mejores intenciones y con todo el amor que tengamos para los pequeños!
Emprendedor, ingeniero, profesor, comediante. Hablo sobre marketing digital con o sin cerveza. Creo que el karma rige nuestras vidas y la mayoría de las veces soy políticamente incorrecto
